Exportaciones: La tormenta perfecta de Kicillof
Por Cristian Folgar
Los bienes argentinos pierden competitividad por el retraso interno del peso con el dólar y la apreciación externa de la divisa.
El deporte nacional en estos días se centra en confundir a la población respecto al problema económico que estamos atravesando.
El gobierno nos quiere hacer creer que no devalúa la moneda, cuando en realidad todos los días el peso pierde valor frente a todos los bienes. Pierde valor rápidamente frente a la leche, el pan, las frutas, la ropa, los electrodomésticos o los automóviles. Pierde valor mas lentamente frente al dólar o al euro en el mercado oficial.
Devaluar no es simplemente aumentar la cantidad de pesos que necesitamos para comprar un dólar o un euro, eso es sólo una parte del problema. Importante por cierto, pero no es el fondo del problema.
¿Qué pasa en una economía cuando aumentan los precios de todos los bienes medidos en pesos menos el tipo de cambio de nuestra moneda frente a otras divisas (por ejemplo el dólar)? Todos los precios aumentan medidos en dólares y perdemos competitividad.
Nuestras exportaciones no paran de bajar porque a los productores locales se les hace cada vez mas difícil exportar. Aumentan nuestros precios internos medidos en dólares y dejan de ser competitivos. Eso sin considerar que en los últimos tiempos como se está apreciando el dólar, a nivel internacional los precios de los bienes medidos en esa moneda tienden a caer.
El aumento de los precios internos medidos en dólares actúa como si nos estuvieran subiendo el piso y la baja de los precios nominales internacionales de los bienes que exportamos medidos en dólares actúa como si nos estuvieran bajando el techo. En el medio el productor local ve aplastada su posibilidad de producir con márgenes brutos positivos. Con un poco de humor negro podríamos decir que es la tormenta perfecta.
El impacto en los sueldos
Hoy tenemos trabajadores con sueldos artificialmente altos en dólares (si dividimos su sueldo al tipo de cambio oficial) cuyos ingresos cada vez les sirven para comprar menos bienes en el supermercado, justo cuando en el resto del mundo con un dólar cada vez se compran mas bienes.
¿Cómo lo explicamos? Simple, el tipo de cambio oficial no refleja el verdadero valor del dólar. ¿De qué le sirve a un trabajador tener un sueldo "artificialmente" alto en dólares, si pierde permanentemente poder de compra y encima cada vez hay menos empleo formal?.
El salario real de los trabajadores aumenta cuando el empleo privado formal aumenta, es exactamente lo contrario a lo que viene ocurriendo en los últimos años. El empleo privado formal esta cayendo, crece el empleo informal o el empleo estatal (que dicho sea de paso en algunos casos también es informal porque son contrataciones temporarias sin beneficios sociales tales como obra social o descuentos jubilatorios).
A los exportadores se los "castiga" al obligarlos a vender sus exportaciones al dólar oficial.
Quienes tienen dólares se niegan a desprenderse de ellos a un precio "bajo". Todos los que pueden comprar dólares oficiales lo hacen porque se dan cuenta que esta barato. Aún cuando quienes tienen dólares pudieran venderlos hoy a un precio mas alto, ¿Para qué hacerlo ahora si nuestra moneda sigue devaluándose localmente (inflación) y el dólar sigue apreciándose?
¿Podrá alguno de los 6 candidatos a Presidente que competirán en octubre evitar una devaluación? No, simplemente porque la devaluación YA OCURRIÓ. Todos los precios de los bienes aumentaron y siguen aumentando medidos en pesos, excepto las divisas que el gobierno las sostiene en un nivel artificialmente bajo.
Lo que podrá hacer la nueva administración es evitar que el costo de la salida de este problema lo paguen los sectores de menores recursos, tal como lo vienen haciendo hasta ahora.
Hoy los sectores de ingresos medios o altos de nuestra sociedad viajan por el mundo con pasajes subsidiados de Aerolíneas y dólares baratos, mientras las fábricas suspenden trabajadores por falta de dólares para comprar insumos y seguimos destruyendo empleos privados formales. Hoy los mas ricos gastan en turismo el bien mas escaso de la economía (dólares al precio oficial) y el costo lo pagan los trabajadores de menores ingresos.
Nuestro problema
¿Nuestro problema es el cepo, el tipo de cambio o la inflación? Definitivamente la inflación. Es por ella que se retrasó el tipo de cambio, y es por el retraso del tipo de cambio que el Estado puso el cepo.
Si modificamos el tipo de cambio pero no bajamos la inflación sólo castigamos a los asalariados en pesos. Ya lo vimos en diciembre 2013/enero 2014. Se modificó fuerte el tipo de cambio pero no se contuvo la inflación. Hoy tenemos mas cepo, más inflación, mas atraso cambiario y menos empleo.
Hay quienes aspiran a que la modificación del tipo de cambio licúe el gasto nominal estatal. De esta manera los sectores de ingresos medios y altos seguirán recibiendo subsidios injustos (como los energéticos) pero que relativamante perderían peso por la modificación del tipo de cambio. Así, la fiesta la terminarían pagando los asalariados en pesos.
Solemos decir que en economía no existen las cenas gratis. Eso es cierto. Habitualmente la cena la pagan los comensales o los dueños del restaurante. En Argentina somos tan creativos y progresistas que se la queremos hacer pagar a los mozos.
Fuente: La Política Online